jueves, 5 de abril de 2007

Compartir el futuro

Es tan cómodo vivir en la total irresponsabilidad, tener a alguién que asuma mis responsabilidades es...¡genial! así puedo dedicar todo mi tiempo a mí mism@. Hay quien comienza un proyecto de futuro con su pareja pero sin implicarse en absoluto en ese proyecto, seguramente, es mucho más fácil permanecer en la inmadurez. Su apuesta es una forma de vida relajada, sin complicaciones y egoísta en la que no se tiene que hacer cargo de nada: " me puedo levantar a las 12 de la mañana que no pasa nada, hacerme un café y tostadas para desayunar...que la comida no está hecha...me voy a la calle y como en cualquier sitio, en vez de prepararla; que no me apetece mucho ir a trabajar...pues digo que estoy enferm@; que mi nene tiene fiebre...que vaya mi suegr@ a recoger al nene; que hay que limpiar...que lo haga mi pareja; lavar la ropa...¡uff! demasiado trabajo, pongo la excusa de que no sé hacerlo y mejor me voy al gimnasio; que los dos trabajamos...sí pero yo cuando vuelvo a casa estoy muy cansad@, además justo hoy ¡me duele tanto la cabeza! que me voy a dormir una siesta..."
¿Será eso compartir una vida y sus responsabilidades? ¿será eso crear un proyecto de futuro? Si eso es compartir, madurar, asumir responsabilidades, crear un proyecto junto a alguien, si es eso...quizá sea mejor no compartir el futuro con nadie.

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